miércoles, 4 de noviembre de 2009

Un atril sencillo y original

Debido a mi afición a la lectura, siempre he gustado de hacerlo con la comodidad que supone el colocar el libro sobre un atril.

Hice varios de un diseño clásico que he regalado a mis hijos y nietos, de diferentes clases de madera, de recoger y guardar, pero suelen ser demasiado aparatosos por su tamaño, por lo que he ideado uno aprovechando un trozo de sapelly y una lamina de metacrilato sobrante de un trabajo.

He aquí el resultado:








La base como he dicho es de madera de sapelly de 25x15x5 cm., en la que hice una ranura inclinada y biselé los cantos superiores.





Corte una lamina de metacrilato de 35x25 cm. y la reforcé con una varilla de igual madera que la base, de 15x15 mm., que encaje en la ranura, sirviendo al mismo tiempo para apoyar el libro.









Y así ha quedado terminado.
Un saludo.